This is default featured slide 1 title

Go to Blogger edit html and find these sentences.Now replace these sentences with your own descriptions.This theme is Bloggerized by Lasantha Bandara - Premiumbloggertemplates.com.

This is default featured slide 2 title

Go to Blogger edit html and find these sentences.Now replace these sentences with your own descriptions.This theme is Bloggerized by Lasantha Bandara - Premiumbloggertemplates.com.

This is default featured slide 3 title

Go to Blogger edit html and find these sentences.Now replace these sentences with your own descriptions.This theme is Bloggerized by Lasantha Bandara - Premiumbloggertemplates.com.

This is default featured slide 4 title

Go to Blogger edit html and find these sentences.Now replace these sentences with your own descriptions.This theme is Bloggerized by Lasantha Bandara - Premiumbloggertemplates.com.

This is default featured slide 5 title

Go to Blogger edit html and find these sentences.Now replace these sentences with your own descriptions.This theme is Bloggerized by Lasantha Bandara - Premiumbloggertemplates.com.

SANITARIOS TARAGUI

Mostrando entradas con la etiqueta Mario Vidal - Escritor Chaqueño. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Mario Vidal - Escritor Chaqueño. Mostrar todas las entradas

lunes, 13 de diciembre de 2021

LA OTRA PROFESIÓN MÁS ANTIGUA DEL MUNDO: APLASTAR AL ENEMIGO

El 13 de diciembre de 1828, el coronel Manuel Dorrego, gobernador y capitán general de la provincia de Buenos Aires, fue fusilado en Navarra, por orden del general Juan Galo de Lavalle.

Todo fue sumarísimo, sin proceso ni juicio previo. 

Al reo, apenas le dieron tiempo para escribir a su esposa Angelita y a sus hijas Angelita e Isabel. “Querida Angelita: me intiman a que dentro de una hora debo morir; ignoro por qué”, le dijo a su mujer.

Hubo algunas voces de clemencia a su favor, entre ellas la del general y terrateniente Eustoquio Díaz Vélez. Éste le dijo a Lavalle: “Estoy persuadido de que Dorrego no debe morir. Es cierto que ha causado muchos males, pero la dignidad del país así lo exige”.

Sin embargo, no hubo marcha atrás. Ya antes de detenerlo, el general unitario había decidido matar a Dorrego, contra el que se había sublevado, y había llegado la hora de hacerlo.

Más aún, emitió un comunicado diciendo que la muerte de Dorrego era “el mayor obsequio” que le podía hacer a Buenos Aires.

Éste 193 aniversario de la sumarísima ejecución de Dorrego, me lleva a escribir algunas líneas sobre otra de las profesiones más antiguas del mundo: la de aplastar al enemigo.

El arrepentimiento de Perón

“Las leyes me concedían el derecho, por el bien del país, de eliminar materialmente a los enemigos de la Nación. ¡Ah!, si yo hubiese previsto lo que iba a pasar, entonces sí hubiera fusilado al medio millón, o a un millón, si era necesario”.

Lo anterior es parte de un reportaje que en Madrid Perón ofreció a la revista “Marcha” de Montevideo, y publicada el 27 de febrero de 1970 en la edición 1.483 de dicha revista.

Esas declaraciones fueron reproducidas el 9 de mayo de 1970 en el número 414 de la revista “Triunfo” de Madrid, y, también, en el primer número de la revista “Premisa”, del 16 de diciembre de 1970.

Era cierto: la Ley 13.234 de Organización General de la Nación para Tiempo de Guerra Exterior, y la Ley 14.062 de Estado de Guerra Interno, leyes que él mismo promovió, facultaron a Perón a aplicar la pena de muerte, pero nunca llegó a ese extremo.

Los que sí llegaron a ese extremo fueron Aramburu y Rojas, líderes de la “Revolución Libertadora”. No les tembló el pulso a estos dos a la hora de aplastar al enemigo.

Lo hicieron cuando el levantamiento del general peronista Juan José Valle, en junio de 1956. Quería traerlo de nuevo a Perón y poner en vigencia la Constitución de 1949, pero fue delatado.

Las radios emitieron comunicados alertando sobre “el estallido de un movimiento subversivo, que obliga a las autoridades nacionales a tomar enérgicas medidas para restablecer la normalidad”.

Esas “enérgicas medidas” consistieron en el fusilamiento de 18 militares y 13 civiles, varios de ellos de manera clandestina. Las ejecuciones recién cesaron con la detención del general Juan José Valle, que apenas horas después fue fusilado en el patio del penal Las Heras.

Minutos antes de su ejecución, escribió una carta a Aramburu: “Ningún derecho, ni natural ni divino, justificará jamás tantas ejecuciones. 

Es asombroso que ustedes hagan gala ahora de una crueldad como no hay memoria, porque con fusilarme a mí, bastaba”, le dijo.

El largo historial universal en materia de aplastamiento del enemigo me recuerda, también, la pregunta de un sacerdote al moribundo general español Ramón María Narváez, quien entre 1844 a 1858 fue siete veces presidente del Consejo de Ministros de España:

“¿Su excelencia está dispuesta a perdonar a todos sus enemigos?”. “No tengo necesidad de perdonar a mis enemigos –contestó Narváez-. Los he mandado a fusilar a todos”.

El fusilador argentino

En Cuba, el aventurero argentino “Che” Guevara dijo en febrero de 1959, en el canal 26 de televisión cubana:

“Fusilamientos, sí, hemos fusilado, fusilamos y seguiremos fusilando. Nuestra lucha es a muerte; tienen que saber esos gusanos cuál es el resultado de la batalla perdida para ellos”.

Lo que dijo, tenía sentido: se estima que el comunismo cubano es responsable de 3.117 casos documentados de ejecuciones, y 1.162 casos de ejecuciones extrajudiciales, la mayoría de las cuales fueron consumadas en la fortaleza “La Cabaña”.

Lo cierto es que la historia está repleta de casos donde la consigna de algunos hombres era la “victoria total”, el aplastamiento total del enemigo.

Incluso en la Biblia

La consigna de “aplastar al enemigo” y exterminarlo por completo es tan vieja que hasta forma parte de la Biblia.

Según la “palabra de Dios”, el primero que la puso en en práctica fue Moisés, quien a su vez la aprendió de su Dios, Jehová.

Aún se enseña, tanto entre los judíos como entre los cristianos, que Dios separó las aguas del mar Rojo para que los hebreos pudiesen pasar, pero luego volvió a cerrarlas sobre los egipcios que los perseguían, de modo que “no escapó uno solo”.

Después, cuando Moisés bajó del monte Sinaí con los Diez Mandamientos y vio que el pueblo adoraba al Becerro de Oro, hizo degollar hasta al último de los transgresores.

Ya en su lecho de muerte, les hizo jurar a sus seguidores, quienes por fin iban a entrar en la Tierra Prometida, que cuando hubieran derrotado a las tribus de Canaán, debían “destruirlos por completo, no hacer tratos con ellos, ni tenerles clemencia”.

Sorprendentemente, para la Iglesia Católica semejante destructor de vidas humanas es un “santo” al que tal vez algunos todavía evocan cada 4 de septiembre.-

FUENTE: Por Vidal Mario

jueves, 7 de octubre de 2021

EL ESCRITOR VIDAL MARIO NO PRESENTARÁ SU LIBRO

Por razones de salud, Vidal Mario no presentará su último libro, en el marco de la Feria Iberoamericana del Libro, que se desarrolla desde éste jueves en nuestra capital.

Dicha presentación estaba programada para éste viernes a las 18, en la Sala 3 del Centro de Convenciones del Domo del Centenario.

Asimismo, no participará del 4° Encuentro Nacional y Latinoamericano de Escritores “Resistencia los Abraza” que, organizado por el Grupo Poetas Unidos, se inicia hoy en la Biblioteca Popular de Resistencia bajo la consigna “Renacer desde las letras”.-

martes, 21 de septiembre de 2021

LAS CUARENTENAS FUERON MÁS UN PROBLEMA QUE UNA SOLUCIÓN

Todavía están frescas en la memoria colectiva aquellas escenas en que más de 24.000 personas fueron obligadas por el gobierno de Formosa a permanecer confinados en centros de aislamiento y cuarentena muy parecidos a campos de concentración.

En dicha provincia, hubo gente encerrada por mucho más tiempo a lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Gran cantidad de formoseños estuvieron virtualmente detenidos, privados de su libertad.

Muchas odiseas comenzaron cuando entre marzo a julio de 2020, el presidente Alberto Fernández implementó una de las cuarentenas más largas del mundo, que afectó duramente a la economía argentina.

En una de esas cuarentenas, que se inició el sábado 22 de mayo de 2021, la mayoría de los argentinos únicamente podían salir a la calle entre las 6 de la mañana y las 6 de la tarde.

Había toque de queda, la gente sólo podía desplazarse hasta las inmediaciones de sus casas, las escuelas y negocios se cerraron, se prohibieron los eventos sociales, religiosos y deportivos, y todo el servicio de transporte virtualmente desapareció

Desafiando al gobierno, miles de ciudadanos salían a la calle a expresar su desaprobación a dichas medidas, por considerarlas abusivas y anticonstitucionales.

El 4 de mayo de éste año, por las redes sociales, corrió por todo el país un mensaje que incluía ésta declaración:

“Señor Presidente y equipo de especialistas: Les comunicamos que por razones de fuerza mayor a partir del 10 de mayo los ciudadanos argentinos retomaremos nuestros trabajos y actividades con los cuidados sanitarios correspondientes, ya que necesitamos comer y alimentar a nuestras familias. Vienen gestionando muy mal ésta crisis. 

No queremos escuchar más solamente a los infectólogos. Queremos escuchar también a economistas y matemáticos especialistas que comparen la letalidad de éste virus con otras numerosas causas de muerte, y así terminar con éste monopolio del virus y de cuarentena eterna que tanto daño nos hace”.

Claramente, desde el punto de vista social, las cuarentenas crearon más problemas que las que resolvieron.

Una criatura sociable

Es que el ser humano es por naturaleza una criatura sociable, y es imposible luchar contra la naturaleza.

El poder de las personas depende de la interacción y de la circulación social, por lo que, al no poder interactuar y circular libremente, pierden maniobrabilidad, pierden flexibilidad.

En muchos casos, el aislamiento hasta termina volviendo paranoicos a muchas personas.

Como decía el doctor Samuel Jhonson (1709-1784), “la soledad es peligrosa para la razón”.

Está comprobado que los efectos del aislamiento sobre la mente humana pueden ser catastróficos.

Siendo el ser humano tan social, la mayoría de las cosas que hace (trabajar, por ejemplo) solamente puede hacerlas mediante la exposición y la circulación constantes.

Moverse, una necesidad

Así que el hombre necesita siempre mantenerse flexible y adaptable. Siempre necesita moverse en los ambientes más diversos y mezclarse, por lo que fuera y por lo que fuese, con sus pares.

Durante mucho tiempo, los niños tampoco fueron a la escuela. ¡Y pobre del niño privado de comunicarse y jugar con otros niños!

En resumidas cuentas, estimo que las cuarentenas debieron haber sido tomados como esos remedios que se toman en pequeñas dosis, no con la fuerza dictatorial con que se las tomó.-

FUENTE: Por Vidal Mario

lunes, 31 de agosto de 2020

"Con críticas a Obligado y elogios a Duca: Vidal Mario presentó otra edición de Napalpí"

Vidal Mario presentó otra edición de “Napalpí, la herida abierta”

Vidal Mario presentó la quinta edición de su libro “Napalpí, la herida abierta”, (Editorial Librería de la Paz), ocasión en que se refirió a algunos episodios vinculados al mundo aborigen ocurridos durante las gestiones de Manuel Obligado, Anselmo Zoilo Duca y el presidente paraguayo Carlos Antonio López.

El acto se desarrolló en la sede de la mencionada editorial, en forma de entrevista al escritor de parte de Lautaro Quirós, director de Cultura de la Municipalidad de Resistencia.

“En el norte argentino, los remingston, los máuser y los winchester marcaron el fin del mundo indígena y el coronel Manuel Obligado fue uno de los exterminadores de indios que se negaban a someterse”, aseguró el autor durante la entrevista.

Apuntó que “Obligado, primo del poeta Rafael Obligado, nunca fue gobernador en el sentido que hoy le damos a ese término porque el Chaco era sólo un departamento del Ministerio del Interior de la Nación. 

Se le llama gobernador porque los territorios nacionales eran también denominados gobernaciones; en realidad él era comandante en jefe de las fuerzas de ocupación militar del Chaco”, aclaró.

Afirmó que “todo valía, no había códigos en aquella guerra contra el indio” y que “Manuel Obligado, cuyo nombre sigue llevando el salón auditorio de nuestra Casa de Gobierno, tampoco los tenía”.

Recordó que el 19 de agosto de 1885 Obligado emitió el decreto N° 5 de creación de dos regimientos de Caballería integrados exclusivamente por indígenas, y los mandó a atacar las tolderías de su propia gente”.

“La verdad –concluyó- es que Obligado estaba imbuido de los más severos principios del deber militar, consideraba enemigos a los indios reacios a someterse y los trataba como enemigos, aunque sus discursos y cartas dijeran lo contrario”.

La gran contribución de Duca

En contraposición con Obligado, Centeno y otros, Mario destacó “la gran contribución” del gobernador Anselmo Zoilo Duca en procura de mejorar la crítica situación del aborigen.

A su juicio, desde el punto de vista social y reivindicativo el aporte más relevante de Duca fue la organización de la Primera Asamblea Indigenista Chaqueña que se realizó durante los días 1,2 y 3 de agosto del año 1958 en la Universidad Popular de Resistencia, bajo la presidencia del historiador Carlos López Piacentini.

Mario calificó a aquel relevante acontecimiento de “punto de inflexión en la evolución de la política indigenista en el Chaco, porque Duca entendía que la raíz del problema aborigen era la educación e impuso su pensamiento en dicha asamblea”.

Destacó a continuación que dicho encuentro se realizar bajo la advocación de Enrique Lynch Arribálzaga, creador de la Reducción de Napalpí y propulsor de otras acciones en favor del aborigen.

El autor pasó revista, seguidamente, a otros hitos sumamente beneficiosos para los aborígenes, como la creación a principios de los años 60 del Barrio Toba de Resistencia, la constitución en 1962 del Coro Chelaalapi, la fundación en 1963 de la Asociación Amigos del Aborigen de Quitilipi, y la sanción en 1987 de la Ley del Aborigen.

Ofreció, a continuación, anécdotas ligadas al universo indígena, entre ellas que a fines de los años 50 López Piacentini dirigía una revista dedicada a reclamar reivindicaciones para el aborigen y que el nombre de la publicación era, precisamente, Reivindicación.

Resaltó además la figura y las obras de otros importantes indigenistas del pasado como el citado Lynch Arribálzaga, el doctor Aníbal Burlli, René Sotelo y la señora Inés García de Márquez.

Atropello a aborígenes paraguayos

El escritor recordó finalmente un “bochornoso episodio de la historia de mi país natal: el compulsivo apropiamiento de inmensas extensiones de tierras indígenas por parte del Estado paraguayo en 1843 y en 1848”.

A través de dos decretos, dijo, “el presidente Carlos Antonio López literalmente les robó sus tierras a los aborígenes que vivían en el Departamento Oriental del Paraguay”.

Explicó que el traspaso de propiedades aborígenes al Estado se dio a través de un decreto dictado el 26 de noviembre de 1843 y de otro decreto similar emitido el 7 de octubre de 1848.

Dichas disposiciones abarcaron, precisó, a tierras de aborígenes de Itá, Yaguarón, Ypané, Guarambaré, Atyrá, Altos, Yutÿ, Santa María de la Fe, Santa Rosa, San Ignacio, Santiago Cosme, Trinidad, Jesús y Carmen de Paraná, entre otras poblaciones.

Explicó que “los López dividieron a los pobladores de esos pueblos en capaces e incapaces de ser propietarios” y que “como los indios y mestizos eran supuestamente incapaces de ser propietarios todas sus tierras pasaron a manos del Estado”.

Señaló que a esos mismos indios el Gobierno les concedió categoría de “ciudadanos de la patria”.

“¿De qué podía servirles eso si ahora debían trabajar para otros las tierras que habían sido suyas, si se les hablaba de libertad pero se les negaba libertad hasta el extremo de negarles el derecho a la tierra, que para ellos era la vida misma?”, concluyó Vidal Mario.-

FUENTE: Vidal Mario - Periodista & Escritor Chaqueño

viernes, 15 de mayo de 2020

LA INDEPENDENCIA PARAGUAYA NACIÓ EN UN RECLAMO POR SUELDOS ATRASADOS

El Paraguay entiende que en un episodio ocurrido entre la noche del 14 y la mañana del 15 de mayo de 1811 logró independizarse del poder colonial español.

En las escuelas paraguayas, se enseña que hubo una revuelta protagonizada por un grupo de militares nativos que tenía por objeto la independencia paraguaya.

La verdad es que dichos oficiales no abrigaban ningún objetivo independentista: sólo querían cobrar los sueldos que el gobernador Velazco les adeudaba.

No había intención de romper ningún cetro opresor, como expresa el himno nacional paraguayo.

No era una emancipación de España lo que pretendían, y como no era eso lo que les interesaba siguieron siendo fieles como siempre al rey español Fernando VII.

Ni siquiera querían echar al gobernador Bernardo Velazco, quien como si nada hubiese pasado fue elegido presidente del Triunvirato que asumió el día 17.

No era romper con España lo que querían los militares paraguayos sino cobrar lo que se les debía.

Únicamente reclamaron que el Cabildo se ponga al día con los sueldos atrasados y que se les dé la importancia que decían merecer por sus resonantes triunfos en Paraguarí y Tacuarí contra las fuerzas argentinas de Belgrano.

Hacía por lo menos ocho meses que la milicia paraguaya no cobraba su sueldo, y como todo asalariado que necesita de su sueldo para vivir, querían cobrar.

No cobraban porque no había un peso. ¿Y por qué no había un peso?. Porque cuando llegó a Asunción una noticia de que Belgrano había vencido a las tropas de Velazco rápidamente todo el tesoro del Cabildo fue remitido a Montevideo.

El jefe del Cabildo, José Gaspar Rodríguez de Francia, estaba convencido que en unos nueve días más las tropas invasoras argentinas estarían entrando en Asunción. Entonces embarcó para Uruguay unos 350.000 pesos.

Era cierto que en una primera batalla (de la que poco se habla) los argentinos habían vencido a las fuerzas españolas de Velazco, y que estaban listos para avanzar hacia Asunción.

Pero eso no ocurrió porque los soldados paraguayos comandados por jefes paraguayos se quedaron, enfrentaron y vencieron a Belgrano en Paraguarí y Tacuarí.

Eso fue lo que se les recordó al poder colonial a través de esta declaración: “Gracias a nosotros, paraguayos, Belgrano no está hoy acá mandando en Asunción. Pero ustedes, europeos, nos siguen tratando con el desprecio de siempre”.

El golpe

Vicente Ignacio Iturbe, uno de los líderes de la protesta, relató así en qué consistió el reclamo:

“Los europeos (así le decían a los españoles) no ayudaron con su dinero a los pagos de salarios de las tropas milicianas utilizadas para defender la frontera, alegando no tener dinero.

Era verdad que el día del ataque corrió la noticia de que los de Buenos Aires habían vencido y los europeos embarcaron para Montevideo trescientos cincuenta mil pesos fuertes.

Los paraguayos, después que repelieron y ausentaron en su frontera a los de Buenos Aires, no fueron contemplados para puestos a los que sólo a los europeos se les tenía en cuenta. A los paraguayos se los trataba con desprecio, peor que antes”.

Fue por estas razones que a las 11 de la noche del 14 de mayo apareció por el Cabildo el mencionado Iturbe trayendo un petitorio firmado por él mismo, por un hermano suyo y por un capitán llamado Pedro Juan Caballero.

En la nota se exigía que a las 8 de la mañana del día siguiente se les entregara las llaves del Cabildo, de la Secretaría, del Tesoro, y el dinero que hubiera de un impuesto llamado Estanco del Tabaco.

Se pidió también la renuncia de tres funcionarios del Cabildo y la incorporación, al mismo, de un tercer miembro.

Lo que ocurrió al día siguiente lo sabemos por el testimonio del teniente José de Abreu, un enviado de la Corte de Portugal que en esos días andaba por Asunción:

“Al romper el día 15, ante la falta de respuestas de Velazco a las peticiones efectuadas, salieron del cuartel los paraguayos en número de ochenta. 

Empujaron para la plaza seis piezas de artillería, de las cuales colocaron dos frente a la residencia del Gobernador y las demás en las esquinas de las calles adyacentes. Se juntaron al mismo tiempo gran número de civiles paraguayos.

Con el alférez Iturbe, mandaron desde el Cuartel dos cartas al Gobernador intimándolo a que cumpliese las condiciones que en la noche anterior se le había requerido y que, de lo contrario, arrasarían su residencia y la misma ciudad.

Llegó en ese momento al Cuartel el obispo con varios eclesiásticos, a quienes se les dijo que la cuestión no era contra ellos, que no había nada contra ellos y que regresaran a sus casas.

El Gobernador a su vez respondió que reuniría al Cabildo y que procedería a la entrega pretendida.

Son ya las ocho de la mañana y ni noticias del Gobernador. Entonces, desde el Cuartel se le manda decir que si en el perentorio término de quince minutos no accedía a lo peticionado comenzaría el ataque. Recién entonces Velazco acepta sus exigencias.

La alegría es total. Los paraguayos izaron una bandera en la plaza con salva de 21 tiros de artillería y gritando todos a la vez ¡Viva la Unión!. Se referían a la unión con Buenos Aires, que era lo que postulaban algunos patriotas.

Al ponerse el sol, bajaron la bandera y dieron nueve tiros de pieza”.

Gobierno de transición

Así de simple fue el movimiento que inició la marcha hacia de liberación política del Paraguay.

En el gobierno de transición emergente del hecho no se vio a ningún paraguayo. El tercer miembro que se reclamaba para el Cabildo no fue un paraguayo sino un español, Juan Valeriano Zevallos.

Igualmente, Velazco y Francia siguieron en sus respectivos cargos como si nada hubiera pasado.

Así continuaron las cosas, hasta que el 20 de junio siguiente se eligió una Junta Superior Gubernativa, a la que sí podría denominarse “primer gobierno patrio”.

El 20 de julio siguiente, la Junta paraguaya comunicó a la Buenos Aires que el Paraguay mantenía su postura de “defender la causa común del señor Don Fernando VII”.

Era muy extraña la situación de esa Junta Superior Gubernativa: siendo un gobierno “patrio” actuaba en nombre del monarca español que Napoleón tenía preso.

Los oficiales nativos seguían vistiendo uniforme militar español y la bandera que se usaba tenía en el centro, sobre un fondo blanco, el escudo de España.

Por un buen tiempo más, después del 14 y 15 de mayo de 1811 la fortaleza del gobierno colonial continuó intacto.

Un héroe de cartón

La lista de próceres paraguayos vinculados al episodio relatado no llega a doce. Había una mujer, Juana María de Lara.

De ese listado debiera eliminarse a Rodríguez de Francia. Afirmar que éste individuo es un prócer de la independencia paraguaya es una broma de mal gusto.

Francia era jefe del Cabildo. Formaba parte del poder colonial. Era uno de los que representaban la corona española en el Paraguay.

Calificaba al Paraguay de “pueblo de tapes” y decía que los paraguayos eran “pura gente idiota”.

Admiraba a la princesa Carlota Joaquina, futura reina de Portugal que en esos tiempos estaba exiliada en Brasil. A principios de mayo de 1811 él y el gobernador Velazco estuvieron a punto de entregar el Paraguay a ésta portuguesa.

Años después, el 17 de julio de 1820 fusiló a Fulgencio Yegros. Éste militar, que fue el verdadero jefe de los acontecimientos de mayo y merece figurar en la lista de los héroes paraguayos, cayó abatido a un costado del Cabildo.

Para consolidar su cargo de Supremo Dictador, después fusiló a unas cincuenta personas más.

Pedro Juan Caballero, otra cabeza visible de aquel reclamo que a la larga terminó independizando al Paraguay, se suicidó en la cárcel para no enfrentar al pelotón de fusilamiento.

Así terminaron sus días muchos los padres de la patria paraguaya. No se sabe dónde están sus restos. No están en el Panteón de los Héroes, donde deberían estar.-

FUENTE: *(Historiador) Por Vidal Mario* / contactoinicial@gmail.com

lunes, 4 de mayo de 2020

LA MATANZA DE CIVILES DE LA QUE NADIE HABLA

A medida que la Guerra de la Triple Alianza (que él provocó invadiendo primero al Brasil y luego a la Argentina) llegaba a su fin Francisco Solano López se volvía más loco.

Su desequilibrio e incontinencia barbárica tocó extremos de violencia difíciles de entender.

Tanto que en un mensaje del gobierno de Cirilo Rivarola (cuyo ministro de Guerra era nada menos que el general Bernardino Caballero) leído en el Congreso Nacional el 17 de agosto de 1871 lo calificaron de “Nerón americano”.

Rivarola y sus ministros afirmaron que “el Nerón americano le arrancó al Paraguay su existencia y su porvenir entero, sacrificando a pasiones brutales muchas víctimas ilustres”.

Un estremecedor ejemplo de las “pasiones brutales” de López fue la matanza de unos cincuenta hombres y mujeres que vivían en varias localidades ubicadas en el Departamento Concepción, región fronteriza con el Brasil.

Esa masacre ocurrió entre abril y mayo de 1869, meses antes de terminar la guerra.

El drama

El drama comenzó en marzo de 1869, cuando varios buques de guerra brasileños aparecieron frente a Itacurubí, a unos diez kilómetros al norte de Concepción.

El comandante interino del Departamento, teniente Zacarías Benítez, comunicó el hecho a López y llamó a reunión urgente de los vecinos más importantes.

Acudieron a su llamado el juez de Paz, Gómez de Pedrueza, el cura Policarpo Páez, así como sacerdotes y jueces de Paz de los pueblos vecinos.

Del encuentro participaron además hombres que por su discapacidad no habían ido a la guerra.

Allí, unánimemente se decidió evacuar la ciudad, trasladar tierra adentro a la población y distribuir por los suburbios de la localidad a las fuerzas de seguridad.

Enterado del bloqueo brasileño, López nombró nuevo jefe de la Comandancia al mencionado juez de Paz, Gómez de Pedrueza, quien dispuso instalar puestos de vigilancia en la costa y trasladar la guarnición a Yuti.

Los brasileños entregaron a Gómez de Pedrueza una intimación de rendición, mensaje que fue reenviado a López a través de un capitán de apellido Lara.

Por razones que nunca fueron aclaradas, a través de ese mismo mensajero López ordenó apresar a Gómez de Pedrueza, a su suegro José Irigoyen, al cura Policarpo Páez y a todos los participantes de la reunión arriba mencionada.

El juez Gómez de Pedrueza y su suegro fueron engrillados y conducidos al campamento de López. La noticia cubrió con un manto de miedo a Itacurubí y a las poblaciones vecinas. Varios soldados y funcionarios huyeron precipitadamente.

Huyeron, por ejemplo, el jefe político de Horqueta, Julián Ayala, el cura Cecilio Román, el sargento Adriano Cabañas y el vecino Manuel Villalba. Todos se entregaron a los brasileños.

López actúa rápido

Informado de esas deserciones, López actuó rápido y puso su mira hacia determinadas familias.

López acusaba a dichas familias de ser cómplices de Benigno López, su hermano, a quien ya había fusilado.

Ordenó al padre Fidel Maíz, capellán mayor del ejército y fiscal de uno de los tristemente célebres “tribunales de sangre”, enviar a Concepción a los sacerdotes Francisco Regis Borda, Manuel Velázquez y Juan Isidro Insaurralde.

Una de las tareas de estos curas era definitivamente repugnante: usaban los confesionarios pasa sacar información sobre los bienes de las familias caídas en desgracia.

Seguidamente vino una orden terrible que debía ser ejecutada por el comandante de Concepción, capitán José Pérez: los acusados de estar involucrado en la llamada “Conspiración de San Fernando” debían ser eliminados.

Esos supuestos conspiradores eran sometidos a torturas como el cepo uruguayana, o azotados hasta la muerte, o privados de alimento hasta morir de hambre.

Pero en los partes aparecían como fallecidas de muerte natural.

Comienza la matanza

Después fue el turno de las familias del lugar que habían sido acusadas de traidoras.

Para esto se organizó un pelotón de la muerte que estaba a cargo de un sargento de apellido Mayor, conocido como “Toro Pichaí”. Éste tenía bajo sus órdenes a cinco soldados y al propio jefe político de Horqueta, Ventura Limeño.

Las primeras muertes sucedieron en Tacuatí. Ocho mujeres de las familias García, Ruda y Villa fueron ultimadas a lanzazos y sus viviendas saqueadas. Así lo relató el comandante político de Horqueta, Ventura Limeño.

En ese mismo pueblo apresaron a Felicia Irigoyen, esposa del juez Gómez de Pedrueza, y a Carmen Agüero, ésta última madre de tres de los hijos de Benigno López, hermano del Mariscal.

Todas fueron lanceadas. La única sobreviviente fue una de las hijas de Carmen. Sus casas también fueron saqueadas.

Para congraciarse con los ejecutores, vecinos de Tres Horquetas organizaron una fiesta.

No les sirvió de nada porque al día siguiente tras despojarlas de sus joyas, dinero y ropa otras veintitrés mujeres fueron muertas a lanzazos y enterradas en una fosa común.

Un día después siete hombres de Concepción fueron asesinados de la misma forma: a lanzazos.

La matanza prosiguió en Laguna, donde lancearon a Ramona Rodríguez de Villa y tres hijas. Aquí también mataron a mujeres de otras familias, entre ellas la de Recalde.

Alrededor de veinte soldados y oficiales de una guarnición que habían huido de la ciudad fueron recapturados en una localidad vecina. Todos fueron lanceados.

Horas más tarde les llegó el turno de morir a doce soldados más de esa misma guarnición.

El pelotón de ejecutores regresó después a Horqueta, donde se dedicó a lancear a otras nueve mujeres, algunas de ellas de las familias Córdoba y Echagüe.

En la localidad de Tupí Pytá, donde muchas familias habían ido a buscar refugio, todas las ejecuciones estuvieron a cargo del comandante Juan Galeano.

Entre los que aquí fueron lanceados estaban las cuatro hijas de un hacendado brasileño llamado Manuel Teixeira, quien llevaba muchos años viviendo en Concepción.

En éste lugar también fueron muertas, siempre a filo de lanza, Rosa Fernández y otras mujeres, algunas ya de edad, de las familias García, Rudas y Lamas.

En resumen, se estima que la cantidad de asesinados fueron unas cincuenta personas pertenecientes a dieciocho caracterizadas familias de las citadas localidades. Las familias Gómez de Pedrueza, Rudaz y Teixeira quedaron extinguidas.

De villano a héroe

A su vez, López fue muerto el 1° de marzo de 1870 a orillas del río Aquidabán por una patrulla brasileña.

En los siguientes 66 años ningún gobierno paraguayo, fuese liberal, colorado o militar, quería saber nada de él.

Pero todo cambió con el golpe de estado que el 17 de febrero de 1936 depuso al presidente Eusebio Ayala.

El nuevo presidente de facto, coronel Rafael Franco, un confeso admirador de Hitler, el 1° de marzo de 1936 lanzó un mensaje dirigido al pueblo paraguayo.

En ese mensaje anunció que declaraba Héroe Nacional del Paraguay a Francisco Solano López.

Nos encontramos entonces con la novedad de que López es héroe nacional de los paraguayos sólo porque así lo decretó, autoritariamente y sin consultar con nadie, un militar que al mismo tiempo echó del país a quien debería ser considerado el verdadero héroe máximo del Paraguay: general José Félix Estigarribia.-

FUENTE: Guerra de la Triple Alianza  - Por Vidal Mario*

lunes, 13 de abril de 2020

"Hay cuatro versiones distintas sobre lo que sucedió con Jesús"

¿Qué sucedió realmente con Jesús, tras su crucifixión?. Los llamados evangelios no ayudan mucho a esclarecer el tema debido a las notorias e insólitas contradicciones en que incurren dichos libros a la hora de relatar la historia.

De hecho, hay cuatro versiones diferentes al respecto. Una versión por cada libro.

“Evangelio de Mateo” dice que dos mujeres fueron a ver el sepulcro, hubo un terremoto, del cielo bajó un ángel que dejó “como muertos” a los guardias, después removió la piedra de la entrada de la tumba, y se sentó sobre la misma.

“Evangelio de Marcos” dice que no fueron dos sino que fueron tres las mujeres que fueron a la tumba. Aquí no hay terremoto ni ángel removiendo la piedra. 

Aquí se afirma que para cuando ellas llegaron dicha piedra ya estaba removida.

Según éste mismo libro no había guardias romanos por ningún lado y las mujeres no vieron a ningún ángel sentado sobre la piedra sino que lo que ellas vieron fue un muchacho dentro de la cueva que estaba sentado a la derecha del cadáver de Jesús.

“Evangelio de Lucas” dice que no fueron dos, como dice el primero de los libros mencionados, ni tres, como afirma el segundo de los libros citados, sino que fueron un montón las que visitaron la tumba. En éste libro no hay terremotos, ni guardias, ni ángel sentado sobre una piedra, ni joven sentado dentro de la cueva.

Éste libro asegura que dos hombres que no aparecen en los otros tres libros se acercaron a ellas para avisarles que Jesús se les aparecería en Emaús. En los otros dos libros anteriores figura que tal aparición sería en Galilea, no en Emaús.

Ninguno de los otros tres libros se acuerda de Pedro. En éste, se hace aparecer al mismo corriendo para dar fe del hecho de la desaparición de Jesús de la tumba.

Por último, “Evangelio de Juan” afirma que únicamente María Magdalena fue a “ungir” el cadáver de Jesús. Dice que la misma entró a la cueva pero la encontró vacía y que cuando salió afuera a llorar aparecieron dos ángeles adentro, sentados en la mesada donde había estado el supuesto cadáver de Jesús.

Además, aporta un dato que no figura en los otros tres libros: Jesús se le aparece sólo a María Magdalena.

Tenemos, entonces, cuatro versiones diferentes entre sí sobre la supuesta resurrección de Jesús.

La Biblia católica Nácar-Colunga afirma que “en todos los evangelios se cierne la inteligencia de los autores sagrados, a quienes el Espíritu Santo inspiró y guió en la ejecución de sus obras”.

Si aquellos libros fueron inspirados por Dios y escritos bajo guía de Él, ¿a qué obedecen las flagrantes contradicciones sobre una misma historia que presentan los mismos?.

Tampoco se entiende lo de la resurrección “al tercer día”. Según esas mismas “inspiradas” Escrituras, el domingo temprano Jesús ya no estaba en la cueva. Lo cual significa que entre el viernes a la noche o del sábado, se fue de allí.

“Desatino de mujeres”

Viene después la incomprensible actitud de los discípulos rechazando la noticia de la resurrección.

Se cuenta que estaban reunidos en Jerusalén cuando las mujeres trajeron la novedad de que Jesús no estaba en la cueva.

No les creyeron sino que calificaron a dicha información de “desatino de mujeres”.

Si habían compartido con Jesús los pasados tres años, si lo vieron haciendo milagros que incluyeron la resurrección de la hija de Jairo y de Lázaro, si les dio potestad también a ellos para hacer las mismas cosas que él hacía, si varias veces les dijo que lo matarían y que al tercer día resucitaría, ¿cómo es que rechazaron la posibilidad de que Jesús hiciera un milagro en sí mismo resucitando y desapareciendo de la cueva-tumba donde lo habían llevado?.

Más sospechosa aún es la incredulidad de esa gente si se tiene en cuenta los portentosos acontecimientos sobrenaturales que según “Evangelio de Mateo” (los otros tres libros ignoraron esto) azotaron a Jerusalén el viernes a la tarde.

Según ese libro durante tres horas, “desde la hora sexta hasta la hora nona”, en toda Palestina el día se volvió noche porque una densa oscuridad se abatió sobre toda la región.

Relata después otros hechos tan espectaculares que merecerían ser la mayor noticia de ese siglo, pero de los cuales nadie en Israel, excepto quien haya escrito “Evangelio de Mateo”, se enteró.

Según éste mismo libro (27:50 al 53), “Jesús dio un fuerte grito y entregó su espíritu. En aquel momento el velo del templo se rasgó en dos de arriba abajo, la tierra tembló, las rocas se partieron y los sepulcros se abrieron y muchos hombres de Dios que habían muerto volvieron a la vida. Salieron de sus tumbas y entraron en la santa ciudad de Jerusalén, donde mucha gente los vio”.

¿Cómo fue que ni con la noche de tres horas en pleno día que se abatió sobre todo el territorio de Palestina, de terremotos, de montañas que se partieron en dos y de muertos que saliendo que saliendo de sus tumbas entraron en Jerusalén a la vista de todos, esos once discípulos no creyeron en la resurrección de su Maestro?.

Hay dos explicaciones: o esos hombres padecían de alguna discapacidad mental que no les permitía darse cuenta de las cosas, o los referidos episodios fueron inventos literarios escritos a propósito para apoyar la teoría de la divinidad de Jesús, dogma que la Iglesia Católica impuso en el siglo III D.C.

El dogma de que Jesús es “El Señor” y que es Dios como Dios fue establecido tres siglos después de su muerte en un Concilio que se realizó en el palacio de verano que el emperador Constantino tenía en Nicea (hoy Turquía), el cual comenzó el 20 de mayo del año 325 y terminó el 25 de julio de ese mismo año.

En ese conflictivo cónclave (los obispos, entre ellos los influyentes Arrio y Nestorio, que rechazaban la idea de que Jesús fuese Dios fueron exiliados), la parte romana de la Iglesia Católica impuso a la fuerza la creencia de que Jesús fue muerto y sepultado, que bajó a los infiernos, que al tercer día resucitó, que subió a los cielos y que allí está hasta hoy, sentado a la derecha de Dios y esperando volver de nuevo a la tierra para encabezar otro fin del mundo.

FUENTE: VIDAL MARIO - "Escritor y Periodista Chaqueño" (Historiador. Autor del libro “La espada asesina”, sobre la Biblia).

lunes, 30 de marzo de 2020

Reflexiones a la luz de una pandemia

Tantas veces se nos dijo que somos los reyes de la creación que lo terminamos creyendo.

Se nos hizo creer que somos la máxima expresión de la creación divina y que fuimos hechos “para dominar a todos los vivientes que se mueven sobre la tierra”.

Mediante la repetición de proclamas lanzadas desde los templos y desde las iglesias también se nos hizo creer que estamos creados a imagen y semejanza de Dios.

En estos días en que un simple virus que ni siquiera podemos ver mantiene aplastado al planeta entero, los vanidosos, los orgullosos, los prepotentes y los acostumbrados a llevarse el mundo por delante deberían repensar tales creencias.

Ésta pandemia mundial les debería servir para que entiendan que tendrían que ser más humildes y comprender que sólo hay uno verdaderamente grande: Dios.

¿Imágenes de Dios?

La suposición de que somos viva imagen y semejanza de Dios se basa en una primitiva imaginación sobre la creación del hombre expresada en Génesis 1:27. La cual es imposible. 

Sólo Dios es perfecto y no está sujeto al error como nosotros ni se equivoca en sus juicios como nosotros. 

Él es el Bien en estado puro. Como tal, sólo puede hacer el bien. No como nosotros que en nuestra imperfección podemos hacer el bien pero también el mal. 

No somos como Él. Somos falibles e imperfectos incluso a la hora de aplicar nuestro libre albedrío.

Él tampoco está dominado por los impulsos del ego como los deseos de poder y de dominación. Nosotros sí.

¿Dios puede morir?

El hombre – por lo menos físicamente - llega un momento en que deja de ser. Se muere. Dios no puede dejar de ser. 

Su ausencia equivaldría a una nada en la cual nosotros no existiríamos ni tendríamos lugar. Por estas razones, no somos ni imagen ni semejanza de Dios como se nos ha hecho creer.-

FUENTE: Vidal Mario - Periodista & Escritor Chaqueño

miércoles, 25 de marzo de 2020

Reflexiones a la luz de una cuarentena

Tantas veces se nos dijo que somos los reyes de la creación que lo terminamos creyendo.

Se nos hizo creer que somos la máxima expresión de la creación divina y que fuimos hechos “para dominar a todos los vivientes que se mueven sobre la tierra”.

Mediante la repetición de proclamas lanzadas desde los templos y desde las iglesias se nos hizo creer que estamos creados a imagen y semejanza de Dios.

En estos días en que un simple virus que ni siquiera podemos ver mantiene aplastado al planeta entero, los vanidosos, los orgullosos, los prepotentes y los acostumbrados a llevarse el mundo por delante deberían repensar tales creencias.

Ésta pandemia mundial les debería servir para que entiendan que tendrían que ser más humildes y comprender que sólo hay uno verdaderamente grande: Dios.

¿Imágenes de Dios?

La suposición de que somos viva imagen y semejanza de Dios se basa en una primitiva imaginación sobre la creación del hombre expresada en Génesis 1:27.

La cual es imposible.

Sólo Dios es perfecto y no está sujeto al error como nosotros ni se equivoca en sus juicios como nosotros.

Él es el Bien en estado puro. Como tal, sólo puede hacer el bien. No como nosotros que en nuestra imperfección podemos hacer el bien pero también el mal.

No somos como Él. Somos falibles e imperfectos incluso a la hora de aplicar nuestro libre albedrío.

Él tampoco está dominado por los impulsos del ego como los deseos de poder y de dominación. Nosotros sí.

¿Dios puede morir?

El hombre –por lo menos físicamente- llega un momento en que deja de ser. Se muere.

Dios no puede dejar de ser. Su ausencia equivaldría a una nada en la cual nosotros no existiríamos ni tendríamos lugar.

Consecuentemente: no somos ni imagen ni semejanza de Dios como se nos ha hecho creer.-

FUENTE: Vidal Mario - Escritor y Periodista Chaqueño

miércoles, 18 de marzo de 2020

Jacques de Molay "HACE 1706 AÑOS ERA QUEMADO EL ÚLTIMO CABALLERO TEMPLARIO"

El 18 de marzo de 1314, Jacques de Molay, gran maestre de la Orden de los Templarios, fue quemado vivo en París.

La hoguera donde quemaron a éste hombre marcó el fin de una historia que se había iniciado doscientos años antes, en 1118, cuando se creó la orden de los templarios, oficialmente llamados “Los Pobres Caballeros del Templo de Salomón”.

Más poderosos que el Papa

Supuestamente la orden había sido creada para brindar protección a los peregrinos que iban a Tierra Santa, pero ese objetivo era sólo una fachada. 

Había un designio económico y geopolítico mucho más ambicioso y grandioso que proteger peregrinos.

Pronto la orden comenzó a expandirse a una velocidad extraordinaria y a recibir un flujo masivo de miembros de alta alcurnia y enormes donaciones en dinero y propiedades.

En poco tiempo los templarios acopiaron (como luego lo harían los jesuitas en América) grandes extensiones de tierra en Francia, Inglaterra, Escocia, España y Portugal.

Entre los años 1128 a 1138, sus posesiones se extendieron también a Italia, Austria, Hungría y Constantinopla. El rey de Aragón incluso les cedió un tercio de sus dominios.

Para mediados del siglo XII ya era la institución más rica y poderosa de la cristiandad.

Por sus propiedades, recursos humanos, habilidades diplomáticas y su poderío armado (era la fuerza militar mejor entrenada, mejor equipada y más profesional del mundo occidental) su influencia política y económica era inconmensurable.

En la cumbre de su poder manejaron casi la totalidad del capital disponible en Europa occidental, y fueron los creadores del crédito para el desarrollo y la expansión comerciales. En éste sentido, pese a que supuestamente era sólo una orden religiosa, hacían todo lo que hoy hace el Fondo Monetario Internacional.

El derecho canónico prohibía a los cristianos la usura, es decir, recaudar intereses sobre los préstamos otorgados. Sin embargo, los templarios prestaban dinero y recaudaban intereses en una escala realmente abrumadora. Eran los “fondos buitres” de hoy.

Ninguna otra institución medieval hizo más por el surgimiento del capitalismo que aquellos “pobres caballeros del Templo de Salomón”.

Un rey hermoso y peligroso

Prestaban plata incluso a la corona inglesa y a reyes como Felipe IV de Francia, “El Hermoso”.

Éste rey se caracterizaba no solamente por sus desmedidas ambiciones sino también por no tener ningún reparo en aplastar a cualquier cosa o a cualquiera que se interpusiera en su camino.

Antes que los templarios atrajeran su atención, ya había secuestrado y asesinado a un papa (Bonifacio VIII) y también había organizado la muerte, probablemente por envenenamiento del siguiente papa, Benedicto XI.

En 1305 instaló a su propio Papa en Roma. Bertrand de Goth, arzobispo de Burdeos, asumió con el nombre Clemente V.

En 1309 secuestró a ese papa y lo alejó de su sede histórica de Roma para instalarlo en suelo francés, en Avignón.

Éste episodio, que pasó a la historia con el nombre de “Cautiverio de Avignón”, convirtió a Clemente V en un simple apéndice de la corona francesa e inauguró un cisma que produjo varios papas rivales y dividió a la iglesia católica apostólica romanba durante los siguientes sesenta años, hasta 1377.

Con Clemente V metido en su bolsillo Felipe obtuvo la libertad que necesitaba para encarar otro de sus objetivos: destruir a los templarios y apoderarse de su legendaria riqueza.

El fin de los templarios

En el amanecer del viernes 13 de octubre de 1307, todos los templarios hallados en suelo francés fueron detenidos y colocados bajo arresto por los hombres del rey.

Durante el juicio, como era la costumbre de la época, muchos de ellos fueron sometidos por el Tribunal de la Santa Inquisición a horribles tormentos.

Por toda Francia empezaron a correr rumores según los cuales los reos habían confesado que no eran católicos sino que adoraban a un poder demoníaco llamado Baphomet.

Se decía que en sus ceremonias secretas adoraban y se arrodillaban ante una cabeza masculina barbuda que les hablaba con voz de trueno y les investía de poderes mágicos.

Fueron acusados de infanticidio, de enseñar a las mujeres cómo abortar, de darse besos obscenos en las ceremonias y de iniciar a los jóvenes postulantes a la homosexualidad.

Incluso fueron acusados de negar a Cristo y de repudiar, pisotear y escupir la cruz.

Felipe intimidó a su marioneta Clemente V para que le apoyara con todo el venerable peso de su autoridad pontificia. El Tribunal de la Inquisición trabajó durante siete años. A los detenidos se les arrancaba bajo tormento las más extrañas confesiones.

Hubo en Europa gente ilustrada y pensante que repudió ese festín de codicia, avaricia, oscurantismo, irracionalidad, ignorancia y superstición institucionalizada.

Dante, en su obra La Divina Comedia, expresó su simpatía por aquellos “mantos blancos” cruelmente perseguidos.

La Orden del Temple fue disuelta por decreto papal del 22 de marzo de 1312 sin que jamás llegase a pronunciarse un veredicto de culpabilidad o inocencia de los acusados.

Dos años después (el 18 de marzo de 1314) Jackes de Molay, gran maestre, y Geoffroi de Charnay, preceptor de Normandía, fueron quemados hasta la muerte a fuego lento a orillas del río Sena.

Una placa en el lugar donde fueron quemados aún conmemora el acontecimiento.

Cuando la historia muestra que estas cosas ocurrieron dentro del “Pueblo de Dios”, uno comienza a pensar menos bien del Pueblo de Dios.-

FUENTE: Vidal Mario* - (Escritor y Periodista)

jueves, 16 de enero de 2020

La Iglesia admite que hubo retoques a los Evangelios

En un acto de sinceramiento y de honestidad teológica poco frecuentes en ella, la Iglesia admitió que uno de los evangelios fue retocado y que los autores de otros no son los que se creía que eran. 

Por ejemplo, dice del final del Evangelio de Marcos que no es “palabra de Dios” sino de alguien que lo escribió doscientos años después de morir Jesús. 

Se trata de Marcos 16: 9- 20, el último capítulo de ese Evangelio que ha sido definido por la Iglesia como “el final no auténtico de Marcos”. 

El añadido Ese párrafo que dos siglos después de Jesús la Iglesia añadió al Evangelio de Marcos dice: “Jesús, que había resucitado a la mañana del primer día de la semana, se apareció primero a María Magdalena, aquella de quien había echado siete demonios. Ella fue a contarlo a los que siempre lo habían acompañado, que estaban afligidos y lloraban. 

Cuando la oyeron decir que Jesús estaba vivo y que lo había visto, no la creyeron. Después se mostró con otro aspecto a dos de ellos, que iban caminando hacia un poblado. Y ellos fueron a anunciarlo a los demás, pero tampoco a estos les creyeron. Enseguida se apareció a los Once, mientras estaban comiendo, y les reprochó su incredulidad y su obstinación porque no habían creído a quienes lo habían visto resucitado. 

Entonces les dijo: “Vayan por todo el mundo, anuncien la Buena Noticia a toda la creación. El que crea y se bautice, se salvará. El que no crea, se condenará. Y estos prodigios acompañarán a los que crean: arrojarán a los demonios en mi Nombre y hablarán nuevas lenguas, podrán tomar a las serpientes con sus manos, y si beben un veneno mortal no les hará ningún daño; impondrán las manos sobre los enfermos y los curarán”. 

Después de decirles esto, el Señor Jesús fue llevado al cielo y está sentado a la derecha de Dios. Ellos fueron a predicar por todas partes, y el Señor los asistía y confirmaba su palabra con los milagros que la acompañaban”. Según la Iglesia, la tardía incorporación de dicho texto al final del Evangelio de Marcos obedeció a que el mismo terminaba “de manera inesperada”. “Fue añadida durante el siglo II”, afirma, y apunta seguidamente que “algunos exégetas suponen que el autor del referido epílogo se apoyó en una tradición oral”. 

Daniel, el gran inspirador De los cuatro Evangelios, el único lugar donde Jesús está sentado “a la derecha de Dios” es en ese añadido a Marcos. Tal imagen, sin embargo, fue copiada del libro de Daniel siglos después de Jesús. Pocos libros del Viejo Testamento han ejercido una influencia tan decisiva en la imaginación y el vocabulario religioso de la cultura cristiana como el libro de Daniel. De ese libro la Iglesia extrajo dogmas como la existencia de ángeles, el juicio final y esa creencia de Jesús sentado en un trono a la diestra de Dios- Padre. 

De allí también sacaron que Dios es un Anciano de vestidura blanca como la nieve que está sentado en un trono “de llamas de fuego y ruedas de fuego ardiente” (7:9-10). De ese libro repleto de fantasiosas visiones se valieron para instalar la creencia de Jesús Rey del Universo porque le fue dado “el dominio, la gloria y el reino” (7:13-14). Del mismo libro se sacó la idea de Jesús bajando sobre las nubes del cielo en el momento del fin del mundo, y de un Jesús a quien aquel Anciano otorga “un dominio eterno que no pasará, la gloria y un reino que no será destruido”. 

En ese libro también se inspiraron para fabricar el concepto de la “gran tribulación” que dicen precederá al fin del mundo, idea que la Iglesia incorporó al Nuevo Testamento a través de pasajes como Mateo 24:21 y Apocalipsis 16:18. De dicho libro sacaron igualmente lo del fin del mundo y la resurrección de los muertos (12:2). 

De allí también viene la difundida idea de que los buenos serán premiados con la vida eterna en tanto que los malos serán castigados con un “horror eterno” (12:2), lo cual fue añadido a los evangelios en pasajes como Mateo 25:46. Incluso para escribir el Apocalipsis se valieron del libro de Daniel, de donde emergen animales extraños que salen del mar, monstruos terribles con dientes de hierro y cuernos con ojos, batallas entre ángeles y hasta un profeta a quien un ángel del Señor toma de los cabellos y lleva volando a Babilonia. 

Juan y Lucas, también en problemas 

El tramo final de Mateo no es el único caso de añadidos a los evangelios que la Iglesia reconoce oficialmente. También admitió que el Evangelio de Juan originalmente terminaba en el capítulo 20: 30-31, y que todo el capítulo 21 fue agregado siglos después de Jesús. 

“Es probable que éste capítulo número 21 –dice- haya sido añadido por la comunidad cristiana a la obra original una vez que ésta ya había sido terminada”. Y si de Juan se trata, la Iglesia también desmontó un mito que por siglos ella misma venía enseñando como si fuera verdad: el discípulo Juan, hijo de Zebedeo, no fue el autor ni del Evangelio que lleva su nombre, ni de las cartas identificadas como 1° de Juan, 2° de Juan y 3° de Juan, ni del libro del Apocalipsis. 

Dichos textos, asegura, fueron escritos entre setenta y ochenta años después de Jesús por un tal Juan de Patmos, que vivía en la ciudad de Patmos, actual Turquía. 

La Iglesia hasta tiene dudas de que uno de los cuatro evangelios haya sido escrito por Lucas. Fundamenta su sospecha de la siguiente manera: “En el prólogo el evangelista no menciona su nombre, que tampoco aparece en el resto del libro. Sólo el título “Evangelio según san Lucas” lo menciona, pero éste título fue añadido en el siglo II, cuando se recopilaron los cuatro evangelios”. 

La Iglesia define a la Biblia como “Palabra de Dios en palabras de hombres”. Pero, a la luz de estas revelaciones, parece ser que la Biblia tiene más palabras de hombres que de Dios.-

FUENTE: Vidal Mario* *(Autor del libro “La espada asesina”, sobre la Biblia)

lunes, 6 de enero de 2020

La huida a Egipto

¡María, María, despierta!. ¡¿Qué pasa, José!?. ¡Tenemos que huir, ahora mismo!. ¿Por qué?. Herodes busca al niño para matarlo. ¿A Jesús?. Si. ¿Por qué?. 

Tiene miedo que le saque el trono. ¿Quién te dijo tal barbaridad?. Gabriel. ¿Quién es ese?. Un ángel del Señor. ¿Anduvo por acá?. 

Me habló en sueños. ¿No habrás estado bebiendo?. Te digo que me habló en sueños. ¿Qué te dijo?. “Levántate, toma al niño y a su madre, huye a Egipto y permanece allí hasta que yo te avise”. 

¿Tiene idea ese ángel de lo lejos que está Egipto?. ¡Como a doscientos kilómetros de acá!. Seguro que lo sabe, igual tenemos que irnos. ¿Cómo?. 

No sé. Somos un anciano, una mujer que se recupera de un parto, y un bebé. ¿Cómo pretenden que nos levantemos, que dejemos nuestra casa con apenas lo puesto y que atravesemos con un niño recién nacido un espantoso desierto?. Dios lo quiere. ¿Y tu taller y todos los trabajos urgentes que te han encargado los vecinos?. 

El día que regresemos les diré que debí desaparecer porque el Señor me lo mandó. No conocemos a nadie en Egipto, donde encima son todos paganos, ¿de qué vamos a vivir allá?. El Señor proveerá. ¿Y la comida y el agua para nosotros y el burro?. Me supongo que no iremos caminando. Te dije que el Señor proveerá. ¿Por qué no te encierras en tu pieza y le pides a ese ángel que nos agarre y nos lleve él?. En unos minutos estaríamos ya en Egipto. 

Eso ya lo hizo una vez. ¿Cuándo hizo eso?. Cuando agarró de los pelos a Habacuc y lo llevó a Babilonia para que le lleve un plato de guiso a Daniel, a quien Nabucodonosor había tirado en un pozo con leones. Los leones no querían comerlo a Daniel, pero él sí quería comer. Lo contó en su libro. 

No leí ese libro y no voy pedirle al ángel que nos lleve él porque somos tres. José, el Señor tiene poder para evitar que pasemos por semejante martirio. Se le podría aparecer en sueños a Herodes y decirle que si intenta matar a Jesús él morirá. ¿Quién eres tú, mujer, para juzgar lo que el Creador del Universo podría o no hacer?. Una vez ya lo hizo. ¿Cuándo?. 

Cuando Abraham, que ya tenía como cien años, y su mujer Sara, de noventa años, viajaron a Gerar, me parece que por negocios. ¿Tampoco leíste eso?. No. Abimelec, así se llamaba el rey de Gerar, hizo traer a Sara para acostarse con ella, pero Dios le dijo en sueños: “Vas a morir porque la mujer que tomaste es casada”. 

María, ese rey seguro que tenía un harén repleto de mujeres hermosas. ¿Por qué iba a querer acostarse con una anciana que ya andaba por los noventa años?. Son cosas que ocurren, José. ¡Bueno, ya perdimos mucho tiempo en conversaciones, María!. 

Tenemos que partir, aunque intuyo que otros inocentes pagarán por nuestra huida a Egipto. ¿Por qué?. Porque después que el ángel habló conmigo en sueños hizo lo mismo con esos árabes que le trajeron oro, incienso y mirra a nuestro niño. Les dijo que no vuelvan a lo de Herodes sino que regresen a su tierra por otro camino. ¿Y?. 

Ya sabes lo que es ese loco de Herodes. Es muy capaz de enfurecerse y matar a todos los niños de la edad de nuestro hijo que encuentre por aquí y alrededores. ¿O sea que muchos niños morirían a cuchillo y espada porque el Señor nos manda a Egipto?. 

Asimismo sería. ¿Y por qué el Señor, que todo lo puede, no impediría tan cruel matanza de inocentes?. María, me recuerdas a tu padre Joaquín porque haces preguntas difíciles de contestar. Es que estoy muy indignada por esto de hacernos levantar en plena noche de lo bien que estábamos descansando, y nada menos que para hacernos caminar por un desierto. Insisto en que sería mejor que envíe a su ángel a decirle a Herodes que si intenta matar a algún niño el que va a morir será él. 

Mujer, te estás sobrepasando y nos pones en peligro. ¿Olvidas que el Señor expulsó del Paraíso a Adán y Eva sólo porque le desobedecieron, y que mató en el desierto a los que sacó de Egipto sólo porque murmuraron contra él?. 

No me olvido, José, pero tampoco tú olvides que mandó a un ángel a decirle a Abraham, que había atado a su hijo y estaba a punto ya de matarlo también por orden suya: “No levantes la mano sobre el niño porque ahora sé que me temes porque no me has negado ni siquiera la vida de tu propio hijo”. Eso sí lo leí. 

Está en Génesis. ¿Y por qué el Señor, que salvó a Isaac, no haría nada para salvar también a estos otros niños que inocentes como el hijo de Abraham no hallarían piedad a la hora de la muerte?. ¿Acaso sólo le importa la vida de Jesús, y que los otros revienten?. 

Es más fácil que el cielo y la tierra dejen de existir que dejen de cumplirse sus profecías. El Señor es rehén de sus propias profecías, y hay una que debe cumplirse. ¿Cuál?. “Se oyó una voz en Ramá, llantos amargos y grandes lamentos. 

Era Raquel, que lloraba por sus hijos y no quería ser consolada porque ya estaban muertos”. ¿Qué tiene que ver esa profecía con nosotros?. Dice Ramá. Nosotros vivimos en Galilea. No había pensado en eso. Y volviendo a nuestro viaje, José, para cruzar el desierto hace falta una caravana conducida por guías experimentados. Nosotros ni vamos en una caravana ni tenemos guía ni conocemos el camino. ¿Cómo vamos a llegar a Egipto?. 

Pediremos al Señor que vaya al frente de nosotros de día en una columna de nube para guiarnos por el camino y de noche en una columna de fuego para iluminarnos, de manera que podamos avanzar de día y de noche. Así lo hizo con nuestros padres, a quienes con grandes prodigios sacó de Egipto. José, a nuestros padres no les sirvió de nada ni la columna de nube ni la columna de fuego porque al final no vieron la tierra que el Señor les prometió porque los tuvo de rehén en el desierto durante cuarenta años hasta que todos murieron y sus cuerpos quedaron tendidos en las arenas del desierto. Basta ya de discutir, María. 

Pongámonos ya en marcha, no sea que el ángel del Señor venga y nos pregunte por qué todavía estamos acá. Marchemos, entonces, y que el Señor nos ayude. Vamos, María. Un largo camino nos espera.-

FUENTE: (Un cuento de Vidal Mario)

jueves, 26 de diciembre de 2019

Las oscuridades de la vida de Martín Almada

“El paraguayo que develó la Operación Cóndor”.

Llama la atención un fallo que en el Paraguay dictó el juez en lo penal Arnaldo Fleitas Ortíz. Éste magistrado condenó a 12 años de cárcel a Nicolás Lucilo Benítez (“Kururú Piré”), de 81 años, a 12 años de prisión a Camilo Federico Almada (“Sapriza”), de 78, y a 12 años de presidio a Federico Almada Morel, de 74 años. 

Se tratan de ex policías de los tiempos de Stroessner a quienes el 25 de mayo de 1989 el doctor Martín Almada acusó de torturar psicológica mente a su mujer Celestina Pérez de Almada hasta matarla, el 5 de diciembre de 1974. 

Lo raro es que en 1977 había declarado que el autor de las referidas torturas “era obra del señor Salomón”, uno que oficiaba de intendente de San Lorenzo. Almada siempre exhibió una vida errática y fabuladora. 

Hasta se auto proclamó descubridor del denominado “Archivo del Terror”. Así que me permito dudar de la veracidad de la historia sobre la extraña forma de morir de su mujer. Al mundo entero le hizo creer que descubrió documentos secretos de la “Operación Cóndor”, en tanto que al citado juez le hizo creer que aquellos tres mataron por teléfono a su esposa. 

Ésta, simplemente murió de un infarto. Un gran colorado Según Martín Almada, el 24 de noviembre de 1974 fue secuestrado por varios efectivos policiales que lo llevaron al Departamento de Investigaciones de la Policía de Asunción, en cuyas mazmorras de inmediato fue salvaje mente torturado. Dice que lo acusaban de “terrorismo intelectual”, de utilizar escuela rural como depósito de armas, y de construir en la ciudad San Lorenzo una “cárcel del pueblo”. 

Lo raro de todo esto es que Martín Almada militaba en las filas del gobernante Partido Colorado. Era tan leal al régimen que en 1968 –según él- el ministro del Interior Sabino Montanaro le ofreció reemplazar a Felipe Salomón como intendente de San Lorenzo. 

Inclusive –también según él-, el 13 de junio de 1972 participó de la elección de renovación de autoridades de la seccional colorada de la referida ciudad, que ganó Felipe Salomón. 

El 3 de diciembre de 1977 declaró que fue el citado Felipe Salomón quien en el año 1974 planeó su detención y tortura. “Más o menos 15 días antes de mi detención el capitán Cecilio Giménez me avisó que Salomón, en estado de ebriedad en un bar de San Lorenzo, decía que yo sería apresado y torturado”, reveló. 

Dos años después, en 1974, hubo otra elección en la seccional colorada de San Lorenzo, en el marco de la cual y por razones que Almada no precisó terminó en la cárcel “por culpa de Salomón”. La historia de Celestina En su domicilio de Asunción, en febrero de 2000, Almada me contó ésta historia: 

“A mi mujer le hacían escuchar por teléfono mis llantos y alaridos. En aquella época era costumbre de Stroesner y su gavilla arrancarnos las uñas, después las orejas y por último la lengua. Al noveno día de mi detención le acercan a ella mi ropa ensangrentada y una aguja de zapatero como prueba de que yo estaba sin uñas. A la medianoche de ese mismo día la llaman otra vez por teléfono y le dicen: “El maestro subversivo murió. 

Venga a buscar el cadáver de su marido”. Fue demasiado para ella y le agarró un infarto. Murió por falta de atención médica porque los médicos no querían venir a la escuela donde estaba detenida, por miedo”. Pasaron varios años de éste supuesto hecho. Un sábado, el periodista Humberto Rubín invitó a su programa de Radio Ñandutí a dos personajes ideológicamente a años luz el uno del otro: Hirán Delgado Von Lepel, abogado de Stroesner, y su colega liberal y ex preso político Hermes Rafael Saguier. 

También estaba Almada, conocido como “el paraguayo que develó la Operación Cóndor”. Almada iba contando la conocida historia de la muerte de su mujer, hasta que entró la llamada de un oyente que se identificó como “Carlos Talavera, colorado de Paraguarí, militante en filas del Movimiento Colorado Popular y ex preso político”. 

El oyente recordó “las por lo menos quince veces que el doctor Saguier me sacó de la prisión” y luego acusó a Almada de “cínico, caradura, y deshonesto especulador de la muerte de su esposa”. “En mi presencia –dijo - en la Dirección de Investigaciones ella le en rostró a usted ser el causante de sus angustias y de su enfermedad por los habituales maltratos a que la sometía y a la impúdica conducta mantenida por usted en sus relaciones extra maritales con alumnas y maestras del instituto de educación que dirigía”. 

Hérmes Saguier confirmó que los dichos de Talavera eran ciertos, y Almada no habló más. Pedidos a Stroessner Apenas tres años después de su detención, tortura y supuesta muerte de su mujer por presiones psicológicas, Almada pidió cinco favores al gobierno de Stroessner. Presentó sus peticiones el 3 de diciembre de 1977 ante la Dirección de Asuntos Técnicos del Ministerio del Interior. 

Lo hizo en una nota en uno de cuyos párrafos consignó: “Solicito un cargo técnico en la Secretaría Técnica de Planificación, si fuere posible en la Oficina de Progreso Social. Otra solución a mi problema sería la concesión de una beca al exterior por uno a dos años. De no darse curso a éste petitorio me veré obligado a emigrar del país”. 

Los tramos finales de esa nota de Martín Almada al gobierno de Stroessner terminaban diciendo: “Me encuentro con una alta moral y con una firme intención de seguir militando en las filas del Partido Colorado. 

En consecuencia, solicito que no se me niegue la oportunidad. Demostraré mi lealtad al Partido y al Gobierno. Para ello necesito una alta comprensión de las autoridades y, fundamentalmente, estímulo”. ¿Cómo Almada fue capaz de pedir favores y ofrecer lealtad a un gobierno que según él lo confinó en un campo de concentración, lo torturó durante años, le hizo comer excrementos humanos, y por añadidura torturó y mató a su mujer?. 

El diario “Il Messagero” de Roma llegó a decir de él que “para quienes creen en la justicia Almada es el hombre de la Providencia”. Consiguió una condecoración del gobierno francés en 1997 por sus dudosos descubrimientos sobre el “Archivo Cóndor”, y logró que le dieran el “Premio Nobel Alternativo de la Paz”. 

Pero hay oscuridades en la vida de éste imaginativo personaje que, a mi juicio, no lo hacen creíble.-

FUENTE: *Vidal Mario  - *(Periodista, escritor, historiador)

Espacio Publicitario | Área de Anunciantes

MICRO COMERCIAL - EL REY DEL SANDWICH

MICRO COMERCIAL - CHACOPRESS

MICRO COMERCIAL - SAITÓ

MICRO COMERCIAL - DIARIO PRIMERA LÍNEA

MICRO COMERCIAL - SUBSECRETARÍA DE DEFENSA AL CONSUMIDOR

Espacio Publicitario | Área de Anunciantes