Desde la habilitación de las playas de Corrientes, cada fin de semana volver a Resistencia es un calvario, de mínimo de dos a tres horas de espera en el puerto para subir al colectivo Chaco Corrientes.
Sumado a la gente que vuelve de sus retiros de fin de semana en Paso de la Patria, San Cosme, Itatí, o quien sólo fue a recorrer la costanera correntina.
Anoche los reclamos eran incesantes, tres cuadras de cola para tomar el colectivo Chaco- Corrientes, desde el puerto de la vecina provincia. Más de 2.000 personas varadas esperando para tomar el colectivo interurbano de vuelta a Resistencia, y se supone que todo enero será así los fines de semana, supuestamente los dueños de las empresas concesionarias del servicio dicen que no pueden poner más coches, ya que las autoridades de Transporte no le autorizan y se ha disminuido la cantidad de móviles. Palabras más, respuestas menos.
“Salís del laburo en Corrientes a las 22, llegás al puerto y te pones al final de la fila de casi tres cuadras. Arribás a tu casa, con suerte, para la 1 a 1.30 de la madrugada” y si sumado a esa espera “llegás de Corrientes después de más de tres horas parado en la fila y de viajar de igual manera en el colectivo. Sumado a que tenés que levantarte a las 5, para volver al trabajo es desesperante” argumentaba visiblemente enojado un usuario.
“Es un hermoso negocio el tema” expresaba otro, “años de vivir de arriba, ligando plata del Estado, mintiendo sobre la cantidad de coches, para cobrar subsidios, lugar, combustibles gratis, tanto que hasta vendían y regalaban, porque en el mes no alcanzaban a usar todo. Sólo recaudan sin invertir ni en una cubierta y ahora lloran. Habría que lisa y llanamente sacarles las concesiones y listo. No sirven ni los funcionarios ni los empresarios. No tienen imaginación y no les importa” manifestaba otro más escéptico que vive en Resistencia.
“Los empresarios ahora millonarios, nunca pusieron un peso. Todo les vino de arriba, ahora pasaron de andar de bici balona, a usar varios BMW. Si no es negocio, porque siguen con la concesión. Y la solución llegaría al estilo argentino, o sea, cuando ocurra algo trágico o grave, recién actuar. El día que le prendan fuego a un colectivo en el puerto, creo que van a entender. Ya será tarde. Ese día. Perdé cuidado que va pasar un circo terrible ese día. Pero a las 48 horas el culpable va ser Montoto…o la gestión de gobierno anterior, o echar culpas a la pobre gente que salió a refrescarse….” se encolerizaba otro.
“Para solucionar el servicio Chaco-Corrientes deben funcionar las dos empresa ERSA y Navarrro SRL y mantener las frecuencias de 15 minutos, al menos hasta la una de la madrugada y en los dos ramales. Por Barranqueras y el directo por Sarmiento, juegan con la necesidad de la gente…Es un negocio de años” imaginó una solución una usuaria.
El drama de las familias
“Todos tienen derecho a divertirse. Hay grupo familiar que está compuesto con tres o cuatro niños que salen a la mañana, juegan en el agua y terminan abatidos en la parada de colectivos. El 1 de enero pasó lo mismo. Para colmo una familia bajó del Chaco-Corrientes alrededor de las 23 en la esquina de Las Heras y Ameghino y esperó el 104. Los chicos dormían en el suelo. Más de una hora esperando, no apareció el 104. Optaron por caminar hasta el lugar de reunión” relataba otro.
“Una verdadera vergüenza, familias con niños pequeños, que va a poder regresar a las 3 de la mañana con suerte, a sus hogares. Un desastre. Los colectivos salen repletos desde el Puerto y aquellos que esperan en el recorrido por Tucumán o avenida 3 de Abril no pueden subir al cole, porque el chofer no los levanta. ¡Deberían poner el doble de coches! Son unos desgraciados realmente” destacó una joven mujer que pasaba por la parada, volviendo desde Paso de la Patria.
“Esto pasa porque después de las 21 comienza a ampliarse la frecuencia entre un móvil y otro y después de las 23 es peor. Tienen que mantener la frecuencia de 10 minutos o 15 minutos entre coche y coche. Para colmo algunos contingentes, que se componen entre 6 a 10 personas, llevan media casa a la playa. No tienen ni el menor de los sentidos!!!! Sentido común h d p! Si ven lo que sucede deberían implementar los cambios de inmediato. Todos los años en ésta época es lo mismo» finalizó la mujer.
Un llamativo combo explosivo que se debió haber previsto, ya que son los usuarios, quienes nuevamente quedan a merced de malas decisiones de los dueños de las empresas de colectivos, los gobiernos o quien corresponda que deba impedir que este tipo de situaciones se siga repitiendo año a año o verano tras verano.-
