En la platabanda central de la avenida encontraron un hombre tendido en el suelo con un disparo en la cabeza, y dieron aviso a la Policía.
Una comisión de la Comisaría Sexta acudió rápidamente y poco después se presentó una mujer que lo reconoció como su expareja, Jonathan Ramírez, con quien acababa de mantener una discusión en su casa. Según contó, al retirarse, él había amenazado con suicidarse.
Parecía que el hecho había sido rápidamente dilucidado. Sin embargo, una particularidad impedía arribar a la conclusión: en la escena no había arma de ningún tipo.
Esto abrió otras hipótesis, hasta que la Policía cotejó las grabaciones de las cámaras de seguridad de la zona, en las que se ve a Ramírez introducir una mano entre sus ropas y después llevarla hacia la cabeza y caer desplomado.
Apenas instantes después, una motocicleta con 2 personas mayores y un niño se detuvieron en el lugar, uno de ellos descendió y recogió algo que se encontraba junto al cadáver, que los investigadores entienden que fue el arma buscada.
Ahora se investiga para tratar de identificar a los motociclistas.-
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