Restán algunas pruebas todavía por parte de la Fiscalía. El acusado se habría negado a las pericias psicológicas.
Según lo emite Pablo Vianello, el abogado querellante, se han solicitado los pedidos de informe de las líneas de teléfono a la empresa Allus Call Center.
Se realizaron las investigaciones correspondientes y se pudo obtener que a partir del día 21 de Junio a la fecha del hecho producido un 1º de Julio, el agresor obviamente profería sus amenazas y dichos en contra de la víctima.
No solo a Luciana Romero; sino también a sus compañeros del trabajo.
Aunque el caso se está profundizando en toda su totalidad “Es una prueba fundamental de que este muchacho venía planificando su cometido para el día 1º de Julio.
Evidentemente existe algún tipo de cuestión psicológica o por lo menos obsesiva por parte de este muchacho respecto de Luciana, quizás la impotencia de no poder cometer su accionar.
Necesitaba hostigarla o lastimarla desde algún punto de vista.
Entonces creemos que por ahí, el accionar de hostigar constante ponía en riesgo el trabajo, y el puesto de trabajo de Luciana, lo hacía con esa intención también, más allá de amedrentar psicológica-mente” . Asustando a la víctima para cometer sus propósitos. Agregó el abogado.
FUENTE: www.diario21.tv
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